miércoles, enero 24

Voy a poner un imán
De delivery existencialista
Como recordatorio
en la heladera:


antes de ser ciudadana
DNI 37 37 7000
antes de entrar en la categoría de persona
gracias feminismo,
antes de ser sujeta de derecho
sujeta a un territorio
Fan de cosas
hater de todo
fui criatura
después cosa deseada
después cosa señalada


Elevaron el índice
y me descubrieron
elevaron la voz
y me pusieron nombre
Un nombre con duda
incierto
Lo arrancaron con una equis
Una tachadura
Una incógnita
La forma más leve de encarnar
dijeron va ser capaz
va a tener miedo
va a querer saber


Antes yo era criatura
era carne irrigada
era grito pulso y dientes
Una cosa de Cronenberg
Tripa de dios
Que quitas el pecado del mundo
no podía vivir en la ciudad
Sólo en la ficción
Y en los zoológicos
Porque no había sido dicha
No me habían dicho
Y lo que no se dice
existe de manera peligrosa

Después pasaron otras cosas
Me tuve que decir a mí
Tuve que elevar el índice
Señalarme
A mí
Ponerme mi propio nombre
Lo arranqué con equis
Porque no sé
Ni quiero saber
Pero sí soy capaz
Y sí tengo miedo
Guardo este ombligo como recuerdo
souvenir de que fui criatura
Recuerdo de Mar del Plata salvaje 
Cosa de cronemberg
No hay que olvidarse. 
Yo fui criatura
después fui hija

ahora soy yo.



Mi alma tiene una pandilla
para sentirse segura y poderosa.
Mi nombre en clave, Barbarie.
Una campera de cuero rosa que diga Barbie atrás
con purpurina.
Una equis tatuada en mi frente para afirmar mi identidad:
soy nacida incógnita, y no me interesa responder preguntas.


La pandilla del ámbito de la necesidad,
quizás cuando las cosas cambien
intentemos tener bancas en diputados.


Ahora tenemos Twitter instagram y gargantas gritonas,
tiempo libre made in desempleo
y muchas ganas de sufrir lo menos posible.
Pero entre muerte
desprotección
desidia y hambre
sólo podemos incendiar cosas
para darle un cuerpo
a la violencia.


Mi alma tiene una pandilla
la pandilla de los niños del verano.
Nos encantaría poder resolver todo
con batallas de baile y trending topics
pero nos despiertan el deseo de decir pandilla,
el deseo de decir incendio.


Atenti
dice la pandilla de mi alma
esto no es un manifiesto adolescente
somos lo más humano
que hizo el humano hasta ahora.


No se equivoquen
grita la pandilla
nuestra empatía no es una debilidad.
Manejamos mejor el símbolo,
manejamos mejor el fuego.
No revuelvan el avispero.
Los vecinos están de jolgorio y no es de mi incumbencia
la lagartija y yo estamos bien
ella se come los bichos y yo la miro tomar sol
ella mastica un mosquito y yo la saludo
cada vez que paso a su lado en el pasillo
como si fuera mi mascota
pienso 
el único tipo de mascota que puedo tener es una lagartija
pienso
si será verdad lo de que puede regenerar la cola
si le gustará más que le digan gekko
si me tendrá miedo o si disfrutará mi compañía

¿cuántos años vive una lagartija?
Yo soy ese perro del vecino
encerrado aullando perdición y soledad
Ese perro del vecino
dientes de leche y pelaje de caniche amarronado,
teñido de lágrimas bajo los ojos
condenado a vivir existencia de caniche
Que se sabe chiquito y bobo
Pero se siente valiente y rey.
Perro del vecino
abandonado todo el dia rascando la puerta,
cantando un tango perruno de desengaño y realidad.
Hoy, al lado de mi casa un perro descubre que no es libre.
Yo soy ese perro de vecino
enamorado del mundo, el peor amor que uno puede sentir,
enamorado de todo, de todo lo que se puede experimentar, 
pero sin experimentar nada,
entrega total al mundo inaccesible.
Ese caniche de vecino
que ahora aúlla
y rasca
y es pura angustia
y parece que su vida se terminara,
cada vez que grita,
que ladra,
que rasca,
pidiendo auxilio al barrio,
a otros perros, esperando que el aburrimiento no se lo trague,
que la angustia no lo fagocite.
Perro existencialista de clase media,
perro de departamento, con tiempo para pensar.
Siempre fui este perro drama queen
que aúlla en su propia casa donde nada malo está sucediendo,
excepto su propia existencia,
como si le arrancaran el alma con uñas de oso.
Caniche de vecino
todos sabemos cómo es esto: cuando vuelva el vecino
y acaricie a este perro
y lo toque y lo mire
y le diga por su nombre
el caniche
se va a olvidar de todo
porque una caricia borra todo

y ese es el problema del amor.