Porque siempre puede haber
escorpiones en tu comida
preparando el aguijón
para arrancarte la lengua
poniéndose crujientes
tené miedo.
Tené miedo cuando apagues la luz
porque los animales venenosos no gruñen
sólo atacan.
domingo, agosto 10
Todo lo que pienso lo pienso por amor pero igual tengo el cerebro gordo y baboso. Mis sesos son una madeja de caracoles sin caparazón, nudos de bichos blandos que se besan y se dan cachetazos. Tengo pensamientos de grasa y pensamientos de manteca, tengo pensamientos fritos, pensamientos al vapor, pensamientos a la mostaza. Todo lo que pienso se me va a los muslos. El cráneo me está quedando chico por eso siempre siento un crujido, una grieta se me va abriendo desde la coronilla y ya siento un poquito el sol en el cerebro. Pienso mucho en esto, pienso mucho en todo ¿Cuándo se me va a partir la cabeza? ¿donde puedo comprar una más grande? Creo que tengo que ir a ese local en frente de Plaza Once que dice "talles para super gordos". Para cerebros super gordos deben querer decir. Para cerebros gordos de pensamientos de amor y de pensamientos de muerte y de pensamientos paranoicos y de pensamientos científicos. Sabor y saber no son la misma palabra, pero de casualidad. Los conocimientos se incorporan igual que los nutrientes. "Traga" es el que estudia mucho. Coger, comer y saber son lo mismo, pero para distintas ocasiones. Ahora estoy pensando en el pensamiento, y siento el crujido otra vez, y otra vez los caracoles, cacheteándose de cuerpo entero, plaf, concepto, plaf, pregunta, plaf, respuesta, plaf recuerdo. Pero después están las cosas en que me da miedo pensar, los caracoles más viejos, los miran desde las sombras, asoman sus ojitos retráctiles y los vuelven a esconder. Esos caracoles comen otros caracoles, estoy segura. Son los que quedan en la cabeza de los viejos cuando ya están dementes y a punto de morir. Son los caracoles de los locos. Caracoles caníbales. Caracoles secretos. Por las dudas habría que inventar una dieta conceptual para neuróticos. La dieta Scarsdale para llegar con el cerebro firme y esbelto al verano.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)